Entre la censura y el surrealismo

Este fin de semana presenciamos el 1er informe de gobierno de Felipe Calderón. Todos suponíamos que no iba a ser un fin de semana tranquilo políticamente hablando... esperábamos trifulcas, pleitos en la cámara, marchas, etc. Lo que creo que nunca esperamos fue regresar 50 años a los tiempos en que el presidente escogía que salía y que no salía en la televisión.

La censura al mensaje de la presidenta de la cámara Ruth Zabaleta al hablar de su postura sobre la recepción del informe no es un error técnico por parte de la presidencia, es un error garrafal, pues fuera de partidismos, si hay algo que el mexicano se ha ganado a pulso es la libertad de expresión. Este sexenio no sólo nos ha dejado dudando de nuestra democracia a la hora de elegir a nuestro presidente, sino que además nos ha mostrado que el poder sigue pasando por encima de los acuerdos, de la ley y de nuestros derechos. Aparentemente el mensaje había sido acordado previamente a cambio de mantener la paz en San Lázaro, y de dejar al Presidente Calderón entregar su informe sin que hubiera trifulcas, sin embargo, la presidencia decidió ignorar los acuerdos y cortar esa parte de la transmisión, la cuál, cabe aclarar, en un evento como ese está previamente agendada, para hacer parecer que todo en la entrega del informe había transcurrido sin mayor controversia.

Al darse cuenta de la omisión, el "detallito" fue llamado error técnico, y se transmitió el mensaje fuera de contexto en otro horario. Ya rodó una cabeza, la del supuesto culpable, el presidente de Cepropie, quien está sirviendo de chivo expiatorio por dicha "tecnicalidad". Increible que a estas alturas crean que el mexicano todavía cree en cuentos de hadas. Es surreal ver esa clase de cinismo, ver como algo que es más que obvio que fue perfectamente planeado pueda ser llamado error técnico y que nos arrojen a la cara su soberbia y abuso de poder.

No soy partidaria hoy en día de ningún partido político de mi país. Coincido con el señor Ciro Gómez Leiva en que esta ha sido la peor generación de políticos que hemos tenido. Ellos se han encargado de hacer que los mexicanos les perdamos el respeto y la fé, y para prueba el abstencionismo que hay en el país, pues es más que obvio para los mexicanos que el país queda en segundo término ante los intereses políticos de nuestros representantes.

Podrá haber opiniones encontradas acerca de si estuvo bien o mal dicho mensaje por parte de la perredista Ruth Zabaleta, o si estuvo bien o mal que los perredistas salieran de la cámara cuando entró el Presidente Calderón a presentar su informe al vicepresidente de la cámara. Dichas opiniones son respetables y válidas. Pero lo que no creo que sea justificable bajo ninguna perspetiva es la censura de dicho mensaje y dichas imagenes. El mexicano se ha ganado a pulso el derecho de ver lo que hacen sus representantes en eventos de tal naturaleza, bueno o malo, conveniente o no para el Presidente, que al fin y al cabo, se salió con la suya dando su mensaje a la nación sin interrupciones.

Saludos